Colalao del Valle
Se encuentra a 190 km. de S.M. de Tucumán y a una altura de 1815 mts, creciendo a orillas del río Santa María que le tributa sus aguas y alimenta sus tierras. Limita al norte con Tolombón (Salta), al Sur con Santa María (Catamarca), al Este con las cumbres calchaquies y al Oeste con las sierras de El Cajón o Quilmes. La actividad económica principal es la producción de nuez, especias, productos artesanales, artesanías y vinos caseros.
Este lugar es, sin duda, privilegiado para el descanso y la meditación, posiblemente debido a la benignidad de su clima, su paisaje encantador, la lentitud del paso del tiempo, la humildad de sus viviendas y la tranquilidad contagiosa de sus calles. Está enmarcado por un sereno paisaje que lo invita a recorrerlo a pie o a caballo.
Historia
La historia de esta población se remonta a principio del siglo XVIII. Luego de la conquista, en este lugar se asentaron familias de origen español. Durante ese siglo, el valle estuvo bajo las órdenes de comandantes españoles, el último de ellos, fue el terrateniente Valentín Armella. Hacia fines del siglo XIX, la pequeña villa se transformó en un lugar de veraneo gracias a su clima seco y a su atractivo paisaje.
La palabra Colalao proviene del quichua y su traducción es: astuto, talentoso, triunfador y también arrullo de palomas. En quechua collai: cacique, lao: pueblo (pueblo del cacique collai). Llamado "el corazón del Valle Calchaquí", Colalao del Valle es un pueblo donde Dios creó belleza, música y poesía. Este poblado es un gran alhajero que guarda celoso toda la sabiduría del espirítu indígena.
Fuente 0019